Razones para Usar Software Libre

Por Cristian Bravo-Lillo / 20 de julio de 2011.- En los capítulos anteriores, no hemos hablado mucho sobre las ventajas o desventajas de usar software libre en la administración pública. En este capítulo, a diferencia de los anteriores, presento una visión mucho más personal y valórica sobre el tema. Me parece serio el presentar, al menos una vez, los valores propios sobre aquellos temas que nos parecen fundamentales.

Razones para Usar Software Libre

¿Qué razones se mencionan para la adopción de software libre por la Administración Pública de un país? Existen cuatro razones principales para ello:

1.El costo de las licencias de software.

2.El desarrollo de la industria de software local.

3.La seguridad nacional.

4.La libertad y autonomía para usar, estudiar y desarrollar software.

Las razones anteriores han sido mencionadas y rebatidas muchas veces por los distintos grupos de interés sobre el software libre: talibanes, anti-talibanes, escépticos y pragmáticos. Revisemos brevemente estas razones.

El costo de las licencias de software fue originalmente un argumento de los talibanes, creyendo que cifras podrían convencer al resto de los actores relevantes. Esta es la razón más frecuentemente utilizada, sobre todo por los gobiernos de izquierda en Latinoamérica, como Ecuador, Bolivia y Venezuela. Es también la más fácilmente rebatible. Fijarse sólo en el costo de la licencia es absurdo, pero no por las razones que he escuchado a la mayor parte de los políticos. El costo de adoptar un software libre es en realidad el costo de romper el vendor lock-in impuesto por el software que se quiere reemplazar, típicamente el de Microsoft. Sin el costo de romper el vendor lock-in, el software libre sería, en un análisis de costo-beneficio a mediano plazo, más barato que el software cerrado. El software libre es un recurso tecnológico para lograr un objetivo mayor; como tal sólo puede darse dentro del marco de una política tecnológica nacional de largo plazo. En el contexto de una estrategia de este tipo en cualquiera de los países de Latinoamérica, el costo de las licencias de software a utilizar es un costo de segundo orden, como mucho.

La segunda razón es el desarrollo de la industria de software nacional, generalmente esgrimida por los pragmáticos. La idea principal es que el gobierno es generalmente el comprador más grande de servicios y productos dentro de un país. Si un gobierno opta preferentemente por software libre, esto generaría un incentivo fuerte para el crecimiento de aquellas empresas que venden servicios de software libre.

El surgimiento, crecimiento o desaparición de una industria se relaciona con muchos factores, de los cuales la presencia de un comprador fuerte puede ser una condición necesaria pero no suficiente. El gobierno es un comprador complicado, donde los contratos y los costos de transacción generalmente imponen barreras de entrada que impiden la participación de jugadores pequeños en un mercado controlado por empresas medianas y grandes. En pos de solucionar este objetivo es que varios países en Latinoamérica han generado con relativo éxito portales de compras públicas. Sin embargo, incluso con reglas definidas, el software es algo difícil de licitar y comprar. No es claro que la creación de una política nacional de software libre esté directamente relacionada con el crecimiento de la industria de software, y en el caso de serlo, de seguro no lo es en el corto plazo. Dudo mucho que algún político en Latinoamérica esté dispuesto a sostener una política de este tipo en el largo plazo. Por ejemplo, hoy no es posible encontrar en el sitio Web del Senador chileno Alejandro Navarro (PS) ninguna referencia al software libre, del que él fuera un promotor principal hace 3 años atrás.

La tercera razón es la de seguridad nacional. El argumento principal es la velocidad con la que se descubren y corrigen parches de seguridad críticos en sistemas de software libre por sobre los sistemas propietarios. Esta es una razón importante, con medidas objetivas que pueden ser comparadas. Sin embargo, la seguridad de los sistemas de un país dependen no sólo de la velocidad con que los problemas de seguridad de un software son corregidos. Depende también del tipo de sistemas, dónde están alojados, de la cantidad de conexiones que establecen con otros sistemas, quiénes tienen acceso al sistema y en qué condiciones, etc.

En el caso de Chile, existen algunas instituciones donde la seguridad es muy importante: por ejemplo, en el Ministerio del Interior gestionando el tráfico de datos a través de la llamada "Intranet del Estado", en el Servicio de Impuestos Internos, preocupado de combatir la evasión de impuestos a través de medios digitales cada vez más desagregados, y en el Registro Civil generando cada vez más servicios Web con servicios más específicos. Si bien esto puede ser abordado desde una estrategia de "caja negra" (es decir, no me interesa lo que está haciendo el software, me interesa sólo lo que sale y entra de éste), los riesgos de esta estrategia son enormes.

Por otro lado, el que existan sistemas computacionales críticos para la seguridad de un país es en Latinoamérica, en mi experiencia, más bien la excepción. El mayor riesgo para nuestros países no tiene que ver con crackers expertos violando la seguridad de sistemas ultra sofisticados conteniendo información clasificada; tiene más bien que ver con el email de un ministro o un subsecretario, siendo accedido por un estudiante de computación y siendo difundido por radio y televisión. En mi opinión, esto es mucho más probable y peligroso; pero es una posibilidad que ha sido largamente ignorada por la mayor parte de los políticos de nuestra región.

La última razón tiene que ver con la libertad y autonomía para usar, estudiar y desarrollar software. Este, en mi opinión, es el único argumento verdaderamente importante, es el menos mencionado, y el único que se relaciona casi exclusivamente con valores. En el próximo capítulo, el último de la serie, hablaremos de este argumento.

Fuentes

Música via LibreCommeLair:

Éste es el archivo del podcast "Cultura Libre", emitido entre el 2010-2013 a través de Manzana Mecánica.

(CC-BY) Carlos Castillo 2020-2013.